La vida moderna con sus desarrollos tecnológicos abrió las puertas a cosas que antaño eran tan solo ciencia ficción, y trae también a la par nuevos desafíos para relacionarnos desde la Excelencia como seres sociales.
Ante estos retos, los roles
masculino y femenino se han desdibujado paulatina y agresivamente con el correr
de los tiempos, marcando consecuencias bastante dolorosas en la relación de pareja y por ende con secuelas emocionales en los hijos.
De manera errónea, hemos
considerado que la liberación femenina implica ser igual a los hombres en absolutamente todos
los sentidos. Este es un verdadero sofisma, puesto que ancestral y
biológicamente cada género tiene sus características esenciales y específicas,
y por tanto también una idiosincrasia que es lícito respetar y honrar.
La evolución social requería, y
sigue requiriendo, igualdad de derechos
y oportunidades tanto para hombres como para mujeres; mas no igualdad de
roles. Aquí radica la raíz de la crisis de identidad que estamos afrontando y
que nos conduce a un vacío existencial, desubicación y carencia de un propósito
superior.
Las mujeres pasaron su carta de renuncia y...
Cuando las mujeres enarbolaron las banderas para pretender que de un momento en adelante deberíamos bastarnos por sí mismas, y renunciar a la protección, cuidado y respaldo que solo los
hombres nos pueden brindar empezó una guerra loca de sexos que tiene
desdibujado el papel que cada quien está
llamado a ejercer en el ambiente íntimo y sexual, de familia y obviamente
social.
Hoy por hoy resulta un desafío
conectar de manera genuina con una pareja. Se trata de una problemática común a ambos sexos, indistintamente de que ya se esté o no en una relación. Algunos no logran encontrar "su media naranja" y quienes ya tienen pareja marcan altos niveles de insatisfacción.
Otra tendencia que señala la época moderna es que mientras más fácil es tener sexo indiscriminado y furtivo; mucho menos factible resulta fortalecer una relación desde el compromiso, la generosidad y la lealtad.
Otra tendencia que señala la época moderna es que mientras más fácil es tener sexo indiscriminado y furtivo; mucho menos factible resulta fortalecer una relación desde el compromiso, la generosidad y la lealtad.
El llamado atento a nuestros
hombres compañeros de camino es a que reconecten con su energía y liderazgo
masculino.
La sociedad, la familia y con prioridad la pareja, demandan con vehemencia que el guerrero retome su lugar para ser el jefe de hogar y el compañero del alma dispuesto a probarse sin recelos como rey y líder.
La sociedad, la familia y con prioridad la pareja, demandan con vehemencia que el guerrero retome su lugar para ser el jefe de hogar y el compañero del alma dispuesto a probarse sin recelos como rey y líder.
El llamado es a que con buena
fortuna, aceptación creciente y alegría cada hombre en cada rincón de la tierra
reconecte con su poder interior, con su capacidad
innata de liderazgo varonil para que pueda cumplir con la verdadera misión de ser feliz e impactar positivamente
con un legado de valores superiores.
Se extraña y se necesita:
- al hombre líder,
- al hombre jefe de la tribu,
- al hombre sano,
- al hombre compañero,
- al hombre que respalda,
- al hombre que provee y cuida emocionalmente de su amada,
- al hombre que señala el camino y es el jefe de tropa,
- al hombre protector que está ahí abrigando con su calor, su seguridad y compasión,
- al hombre noble que se brinda desde la generosidad y la aceptación.
Después de leer estas líneas te pregunto: ¿tú sientes amenazado tu
rol y tu liderazgo?
Si es así, ¡HABLEMOS!
Por tu derecho a amar para ser amado,
Tu Coach de Pareja&Liderazgo con Propósito
P.D. Un verdadero líder toma decisiones rápidas, efectivas y
de alto valor agregado que lo reconecten con su poder superior.